"Rusia ha sido y sigue siendo un socio extremadamente importante para Alemania y la economía alemana, pese a la actual crisis de las relaciones económicas bilaterales", dijo en una entrevista al portal Russlandkontrovers.de del Foro Alemán-Ruso.
A principios de 2014, continuó, se hizo notar un declive que continúa hasta hoy en día y afecta el comercio entre Rusia y Alemania.
"Las sanciones, especialmente financieras, aceleraron y reforzaron esa tendencia; por ejemplo, se dificultó la financiación de grandes proyectos de infraestructura", señaló Gabriel, agregando que el desplome de los precios petroleros también acentuó el declive de la economía rusa.
Las relaciones entre Moscú y Occidente empeoraron a raíz de la situación en Ucrania y la adhesión de Crimea a Rusia tras un referéndum celebrado en marzo de 2014, que los países occidentales calificaron de "anexión ilegal".
Ese mismo año EEUU, la UE y otros países aprobaron varios paquetes de sanciones contra Rusia, que respondió con un veto a las importaciones agroalimentarias.