"Un ámbito que hasta ahora no ha sido atendido sistemáticamente por Cataluña (al menos sobre el terreno) y que puede ser de gran importancia durante los próximos años son los llamados BRICS", señala el medio.
Ante la importancia de estos países, el nuevo Gobierno "debería asignar delegaciones" que puedan representar a Cataluña ante estas potencias, aunque en el caso de Rusia creen que es "una incógnita" su posición respecto al proceso independentista.
"Obtener el reconocimiento de países con la influencia y poder como Estados Unidos debería ser uno de los principales objetivos de la diplomacia catalana", señala el medio: "Y no hay ningún espacio mejor para conseguirlo que ante las Naciones Unidas", agrega.
Entre los desafíos del nuevo consejero de Asuntos Exteriores del Gobierno catalán, Raül Romeva, podría estar el de intentar nombrar un representante permanente ante las Naciones Unidas, imitando el nombramiento que se hizo de Amadeu Altafaj para este cargo ante la Unión Europea.
Este puesto de representación de Cataluña ante la ONU podría ocuparlo el expresidente Artur Mas, según Vilaweb.
Europa
"Alemania es quizás el país europeo más importante y donde tenemos más trabajo que hacer", escribe.
Para este desafío, el argumentario girará en torno al derecho democrático de Cataluña a convertirse en un Estado y a su voluntad de solidaridad internacional, por ejemplo, la voluntad de acoger refugiados sirios por encima de la cuota española.
El medio también destaca la importancia de nombrar un nuevo delegado en el país, dado que el anterior tuvo una posición "bastante discreta".
El papel de las delegaciones es una de las cuestiones más relevantes de este nuevo Gobierno catalán.
El propio Romeva señaló en varias ocasiones que reforzar la presencia en el extranjero será algo "fundamental" en su Consejería.
Entre otras cuestiones también destacan la importancia de que Diplocat, el consejo que centraliza la actividad diplomática del Gobierno catalán, "cuente con suficientes recursos para mantener y ampliar su actividad".
Entre los desafíos de la Acción Exterior de este nuevo Gobierno también se encuentra la de ampliar "la red de representación política" y de "negocio para las empresas catalanas".
Otro de los objetivos es impulsar la agencia de promoción de las empresas catalanas en el exterior, ACC1Ó, que tiene actualmente oficinas en ciudades como Sydney, Bombay, Tokio, Santiago de Chile y Estambul.