"Fueron destruidos 70 puntos de mando, 21 campamentos de entrenamiento, seis plantas de municiones y explosivos, 43 depósitos de armas, seis instalaciones de almacenamiento y refinación del petróleo, así como otros objetivos", consta en el comunicado.
Defensa destaca que “gracias a los ataques se han creado las condiciones para que el Ejército sirio continúe, en coordinación con otras unidades armadas, su ofensiva en las zonas de Alepo, Idlib, montañas de Latakia y Palmira”.
El grupo terrorista Daesh, que se autoproclamó Estado Islámico (EI), está proscrito en varios países, incluida Rusia.
El pasado 30 de septiembre, la Fuerza Aérea rusa inició bombardeos sobre las posiciones de Daesh y otros grupos terroristas en Siria a petición del presidente Bashar Asad. Algunos ataques fueron realizados también desde buques y submarinos de la Armada rusa.