El plan de refuerzo en los mecanismos de Defensa de Reino Unido se extiende por cinco años y viene precedido por el reciente compromiso de incrementar en un 30 por ciento el presupuesto nacional en la lucha contra el terrorismo.
El Ministerio de Defensa destinará gran parte de su presupuesto adicional al refuerzo de su capacidad aérea marina, mermada por los recortes presupuestarios de 2010.
Así, Cameron anunciará en el Parlamento de Westminster la adquisición de nueve patrulleras Boeing P8, con sistemas de vigilancia aérea y antisubmarina, que sustituirán a los aviones Nimrod.
Al mismo tiempo se extenderán por otros diez años, hasta 2040, las operaciones con los aparatos Typhoon de la Real Aviación británica, la RAF.
En el prólogo del documento, el dirigente conservador defiende que el revisado y reforzado plan estratégico "es vital en un momento en que están creciendo las amenazas contra nuestro país": "Del auge del Estado Islámico y una mayor inestabilidad en Oriente medio a la crisis en Ucrania, la amenaza de ataques cibernéticos y el riesgo de epidemias globales, el mundo es más peligroso e incierto hoy que hace cinco años", escribe.
El nuevo plan estratégico del Gobierno conservador parte de la base de que "no podemos elegir entre defensas convencionales contra amenazas provenientes de un Estado y la necesidad de contrarrestar amenazas que no reconocen fronteras nacionales", en referencia a los fundamentalistas islámicos.
"Nos enfrentamos a las dos amenazas y debemos responder a ambas", advierte Cameron en el informe.
El primer ministro comparecerá en el Parlamento de Westminster tras su regreso de París, donde se reunió por la mañana con el presidente François Hollande y honró a las víctimas de los atentados del pasado día 13.
Cameron ofreció ayuda logística al Gobierno de Hollande en sus ataques contra el EI y expresó su deseo de que la RAF se una a las misiones internacionales áreas sobre Siria en cuanto cuente con el apoyo del Parlamento.