Becerra hizo estas declaraciones luego de que el presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, del opositor Partido Republicano, propusiera un escrutinio más eficaz de los aspirantes a refugiados.
El fin de semana, y ante las sospechas de que uno de los terroristas que actuaron en París el viernes pasado habría llegado a Francia entre los refugiados procedentes de Siria, varios políticos estadounidenses, entre ellos los precandidatos presidenciales Donald Trump y Ted Cruz, solicitaron que Washington les niegue la entrada.
Tema: Ataques terroristas en París
Al igual que ellos otro republicano, Jeb Bush, pidió que el veto no se hiciera extensivo a los sirios de religión cristiana, perseguidos de forma encarnizada por los miembros del Estado Islámico.
Más comedido que sus correligionarios, Ryan explicó que "lo prudente y responsable sería hacer una pausa en el programa de refugiados para verificar que los terroristas no intenten infiltrarse".
Aunque el presidente Barack Obama llamó a "no mezclar el terrorismo con la crisis de refugiados", 27 gobernadores, en su mayoría republicanos, dieron marcha atrás en un programa que preveía dar cobijo a 10.000 sirios el año próximo.
Alison Parker, codirectora de Human Rights Watch en EEUU, condenó la resistencia de los 27 gobernadores a recibir refugiados sirios.
"Los ataques de París demuestran la terrible brutalidad de la que huyen estos refugiados", comentó Parker, "y ahora, más que nunca, los estados de EEUU deberían mostrar su coraje y resolución frente al terrorismo multiplicando sus esfuerzos para acoger a aquellos admitidos por el Gobierno".
Esta negativa violaría leyes de EEUU y tratados internacionales de derechos humanos, dijo la ONG y recordó la minuciosa investigación que realizan sobre los solicitantes de asilo las agencias de seguridad y el Departamento de Estado.