"Quiero que para 2020 sean eliminados 2 millones de gatos salvajes para que las cinco islas y diez regiones del continente se vuelvan seguras y libres de felinos silvestres", cita el documento las palabras del titular de Medio Ambiente australiano, Greg Hunt.
Las medidas extremas contra los gatos domésticos (felis catus), que habitan de forma salvaje el territorio de Australia, se aplicarán a 10 millones de hectáreas y pretenden conservar la diversidad animal del país. Se estima que actualmente habitan en el continente unos 30 millones de felinos.
Las autoridades del país le incriminan a los gatos la desaparición de unas 27 especies mamíferas, mientras otras 120 se encuentran amenazadas por su veloz proliferación.
Las autoridades planean invertir en el programa de exterminio de felinos unos 4,8 millones de dólares, además han pedido a los dueños de las simpáticas mascotas castrarlas y no permitirles salir a la calle.