Noul, que según los meteorólogos filipinos, trae vientos de hasta 220 kilómetros por hora, alcanzará las costas filipinas hoy.
“Esta es una tormenta muy peligrosa, la más fuerte de todo el año”, dijo Rene Paciente, uno de los jefes de la oficina estatal de meteorología y astronomía.
Según los datos más recientes del ente, Noul está a 100 kilómetros al noreste de la provincia de Cagayán.
Cada año, durante la temporada de lluvias de junio a diciembre Filipinas registra unas 20 tormentas y tifones.
En 2013 el país sufrió el más devastador de ellos, el supertifón Yolanda, que causó más de 6.300 muertos. Unas 1.000 personas todavía son consideradas desaparecidas. El desastre destruyó y dañó 1,1 millones de casas dejando a unos 4 millones de filipinos sin techo.