El domingo pasado, 8 de febrero, el nivel de las reservas de combustible en los depósitos subterráneos registró el 49,51% de su valor máximo. Anteriormente el nivel más bajo fue registrado ese mismo día en 2011.
La sustracción del gas de los depósitos europeos avanza a ritmos acelerados, los meteorologistas pronostican en febrero y marzo unas temperaturas más bajas que el año anterior.
En esta situación no tiene sentido poner las esperanzas en el consorcio ruso Gazprom, que busca poner fin a la reexportación del gas ruso de Europa a Ucrania.
Los actuales suministros desde Rusia se mantienen a nivel de los volúmenes mínimos estipulados en los contratos, es decir, 150 millones de metros cúbicos menos que en 2014.
Europa, entretanto, suministra a Ucrania más de 40 millones de metros cúbicos diarios, comenta Novie Izvestia.