Los golpes fueron asestados en las cercanías de la ciudad siria de Kobani, cerca de la frontera con Turquía, y en la zona de las ciudades iraquíes de Sinjar, Kaima, Ramadi, Mosul y Samara.
Como resultado, fueron aniquilados varios grupos extremistas y destruidos sus búnkeres, vehículos y arsenales.
La organización terrorista Estado Islámico (EI), conocida anteriormente como Estado Islámico de Irak y Levante, proclamó en verano un califato en las zonas de Siria e Irak que mantiene bajo su control.
El grupo se hizo famoso por su crueldad, el asesinato de miles de civiles y la toma de varios miles de rehenes.
En agosto pasado, una coalición liderada por EEUU –que en la actualidad incluye más de 60 países, según Washington– comenzó bombardeos contra las posiciones del EI en Irak, y en septiembre, en Siria.