París, 16 de abril, RIA Novosti. Los defensores de los derechos humanos de Francia planean instituir un comité en apoyo a Irina Bélenkaya, acusada por autoridades francesas del secuestro de su hija Elise André de tres años y detenida en Hungría, informaron hoy las organizaciones Stop Violence y Acalpa.
La historia de Elise André provocó mucha resonancia. La niña fue secuestrada en tres ocasiones en dos años. Luego que sus padres - la rusa Irina Bélenkaya y el francés Jean-Michel André - decidieron divorciarse, la madre viajó con su hija a Rusia, donde un tribunal dictaminó que Elise podía permanecer bajo la tutela de su madre.
Pero el ex esposo logró lo mismo de la Justicia francesa y en otoño de 2008 secuestró a la pequeña en Moscú y de forma ilegal, al no contar con la autorización de su madre, viajó con Elise a Francia.
Viviendo con su padre en Francia, Elise fue secuestrada a finales de marzo por tres desconocidos. El ex esposo declaró a la policía haber reconocido en uno de los secuestradores a Bélenkaya y en consecuencia, las autoridades francesas emitieron por Interpol una orden de búsqueda y captura contra Bélenkaya como presunta cómplice del secuestro.
En la noche del 13 de abril, Irina y su hija fueron detenidas en Hungría, en la frontera con Ucrania. Las autoridades húngaras informaron inmediatamente sobre la detención al padre francés al padre francés, quien arribó a Budapest, donde le fue entregada la niña. Irina compareció ante el tribunal húngaro.
"A solicitud de muchos padres prevemos crear un comité, para que Elise pueda recuperar a su madre y para que ésta se vea en libertad lo más pronto posible. Aspiramos a lograr que Elise tenga a los dos padres, dos familias y dos culturas", dice el documento emitido por los defensores de derechos humanos franceses.
Francia insiste en la extradición de Bélenkaya, quien rechazó la víspera el procedimiento de extradición simple. Como resultado de ello, el tribunal tendrá que investigar en el transcurso de 40 días nuevos documentos que presenten las partes, para tomar la decisión definitiva respecto a la extradición. Se expidió una orden para el arresto preliminar de Bélenkaya, hasta el 25 de mayo de 2009.
"Cuando Elise estuvo en Hungría con su madre, en vez de quitarla a ésta y ubicar en un hogar, volviendo a traumatizarla, ¿por qué no fue escogida una actitud positiva, en interés de la niña?", preguntan los defensores de los derechos humanos.
Stop Violence y Acalpa critican a las autoridades húngaras, "las que no invitaron al padre y a la madre de Elise, ni a diplomáticos de Rusia y Francia, tampoco exigieron acatar la Convención de la ONU sobre los Derechos del Niño, ratificada por estos tres países".
"Al entregar a la niña al padre, Hungría violó los artículos 3,4,7, 8, 10 y 11 de esta Convención", se afirma.
El presidente de Stop Violence, Jacques Barbie, dijo a RIA Novosti que el comité en cuestión puede organizar negociaciones a nivel político, prestar apoyo jurídico y atraer la atención de los medios noticiosos franceses, incluida la televisión, al problema de Elise e Irina.
